El Consejo Nacional de Derechos Humanos señala un camino para el Cannabis - y pasa por la salud pública

El Consejo Nacional de Derechos Humanos señala un camino para el Cannabis - y pasa por la salud pública

CNDH sugiere políticas para ampliar el acceso al Cannabis medicinal | CanvaPro

Publicado el 23/11/2025

El debate sobre el Cannabis medicinal en Brasil se está moviendo del terreno del tabú al de la evidencia científica. Aun así, quienes viven esta realidad ven claramente que el país sigue atrapado en una lógica fragmentada, burocrática y desigual.


Por eso, la Recomendación nº 18/2025, recientemente publicada por el Consejo Nacional de Derechos Humanos (CNDH), merece atención. El documento no es solo un gesto técnico, es un proyecto. Propone una política de Cannabis medicinal centrada en los derechos humanos, la ciencia y la equidad.


Uno de los puntos más innovadores es la propuesta de que el Ministerio de Agricultura regule mecanismos de certificación participativa de la producción de Cannabis medicinal. En otras palabras: reconocer que es posible y legítimo garantizar calidad, trazabilidad y seguridad sanitaria sin excluir a quienes actualmente sostienen la producción de base comunitaria. De esta forma, las asociaciones de pacientes pasan a ser consideradas actores legítimos de la salud pública.


Otro avance sugerido por el CNDH es la creación de Centros de Especialidades Complementarias en Terapia Cannábica. Estos centros serían espacios multiprofesionales dentro del SUS, donde los pacientes podrían recibir atención médica y farmacéutica, orientación sobre el uso seguro de los productos y monitoreo de posibles efectos adversos.


Se trata de un paso audaz y necesario. Después de todo, el Cannabis está relacionado con una especialidad médica; es una terapia transversal que dialoga con diversas áreas, como neurología, psiquiatría, oncología y manejo del dolor crónico. El cuidado con el Cannabis es parte del cuidado integral en salud.


Otro eje estructurante de la recomendación es la formación académica. El CNDH propone que la enseñanza sobre el sistema endocannabinoide, idealmente, el endocannabinoidoma, un concepto más amplio, y las terapias cannábicas se vuelvan obligatorias en cursos del área de la salud, tema abordado en la columna anterior publicada aquí. Puede parecer obvio, pero aún está lejos de la realidad de las universidades brasileñas.

El texto no contempla otras formaciones, pero agrónomos, ingenieros agrícolas, genetistas, químicos y otros profesionales también necesitan aprender sobre el tema.


El documento también sugiere la creación de programas de residencia y convocatorias de investigación específicas sobre el tema, lo que puede impulsar la producción científica nacional y reducir la dependencia de datos internacionales.


Por último, quizás el fragmento más simbólico del documento sea el que defiende la integración del Cannabis medicinal en el Programa de Medicamentos de Alto Coste, garantizando acceso gratuito a través del SUS.


Hoy, miles de pacientes solo pueden mantener el tratamiento a través de decisiones judiciales o del apoyo de asociaciones.


La Recomendación nº 18/2025 es un mapa. No tiene fuerza de ley, pero indica un camino que el Estado brasileño puede, y debe, seguir. Un camino donde la ciencia, la justicia social y la dignidad caminan juntas.