El cannabigerol muestra potencial analgésico en un nuevo estudio de la Uerj
Investigación en roedores sugiere que el compuesto de Cannabis sativa podría ser una alternativa más segura para el tratamiento del dolor crónico
Publicado en 08/09/2025

"El CBG no tiene efecto psicoactivo y es precursor químico de otros cannabinoides”, explica el profesor Guilherme Carneiro Montes. Imagen: Canva Pro
Un estudio realizado por la Universidad del Estado de Río de Janeiro (Uerj) ha identificado efectos analgésicos prometedores en una sustancia aún poco explorada de la planta Cannabis sativa: el cannabigerol (CBG). Las pruebas en roedores mostraron alivio para diferentes tipos de dolor, incluidos los neuropáticos, que son difíciles de tratar. El estudio, respaldado por Faperj, fue publicado en la revista Scientia Pharmaceutica.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), alrededor del 30% de la población mundial sufre de dolores persistentes. Por lo tanto, la búsqueda de nuevos medicamentos efectivos, pero con menos riesgo de dependencia y efectos secundarios que los opioides tradicionales, sigue siendo una prioridad.
“La Cannabis sativa contiene cientos de compuestos. Los más conocidos son el tetrahidrocannabinol (THC), responsable de los efectos psicoactivos, y el cannabidiol (CBD), con un amplio potencial terapéutico. Menos conocido, el CBG no tiene efecto psicoactivo y es el precursor químico de otros cannabinoides”, explica el profesor Guilherme Carneiro Montes, coordinador del proyecto en el Instituto de Biología de la Uerj (Ibrag/Uerj), en una nota publicada por la universidad.
Cómo se realizó la investigación
El estudio utilizó roedores con mayor sensibilidad al dolor debido a la hipoxia-isquemia prenatal, una condición que simula complicaciones durante el embarazo. Se administraron dosis orales de CBG (50 mg/kg) y se probaron tres modelos de dolor: térmico, inflamatorio y neuropático.
- Prueba térmica: los animales tratados tardaron más en reaccionar al ser colocados en una placa calentada a 52 °C, lo que sugiere un efecto analgésico central.
- Prueba inflamatoria: en una simulación de una picadura de hormiga, el CBG mostró acción tanto en la fase aguda como en la inflamatoria.
- Dolor neuropático: después de diez días de tratamiento, se observó una reducción significativa de la sensibilidad dolorosa, sin efectos secundarios como sedación o deterioro motor, comunes en analgésicos potentes.
Otros resultados en camino
Otro estudio reciente, publicado en la revista MDPI, investigó los efectos del CBG en el tratamiento de la dermatitis atópica (DA), una condición inflamatoria crónica de la piel. Los investigadores analizaron modelos celulares y experimentos con ratones y observaron que el compuesto redujo los marcadores inflamatorios y mejoró la integridad de la barrera cutánea.
El estudio sugiere que el CBG podría ser un candidato prometedor para el desarrollo de terapias tópicas dirigidas a enfermedades inflamatorias de la piel. A pesar de los resultados alentadores, los autores destacan la necesidad de realizar nuevas investigaciones clínicas en humanos para confirmar la eficacia y seguridad del compuesto.
Resultados y próximos pasos
“Nuestros análisis moleculares mostraron que, además de aliviar el dolor, el CBG parece interferir en los mecanismos que contribuyen a su persistencia crónica”, afirma Bismarck Rezende, doctorando en Fisiopatología Clínica y Experimental en la Uerj y primer autor del estudio.
“Además, observamos que el compuesto actúa de manera diferente en machos y hembras, lo cual es importante tener en cuenta en futuras investigaciones y tratamientos”, agrega.
A pesar de los resultados, los investigadores enfatizan que aún se necesitan ensayos clínicos en humanos para confirmar la eficacia, seguridad y las formas ideales de administración.
Con información de FAPERJ