Siete años después de la legalización de la cannabis medicinal en el Reino Unido, una investigación realizada por Releaf con 1.669 pacientes recetados revela que el 97% informa de una mejora en su calidad de vida. De estos, el 78% calificó su tratamiento como "muy" o "extremadamente efectivo".

Un dato que llama la atención: el 88% de los encuestados afirmaron no haber experimentado efectos secundarios desde el inicio de la terapia. 

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Entre las afecciones tratadas, las más comunes son el dolor crónico (47,5%) y los problemas de salud mental (31,4%), y el 72% de los pacientes afirmaron usar cannabis para más de una afección simultáneamente. 

Los desafíos persisten: estigma y falta de claridad legal

A pesar de los beneficios terapéuticos, los pacientes señalan que aún enfrentan prejuicios sociales y falta de confianza para usar la medicación en público: solo el 25% se siente totalmente cómodo, y el 20% informa de ansiedad situacional o estigma directo. 

La comprensión de las leyes sobre la conducción también es insuficiente, solo el 60% afirma tener confianza en lo que se puede o no se puede hacer.

Es notable que el 22% de los pacientes tienen percepciones equivocadas sobre la forma legal de uso: en el Reino Unido, la flor recetada debe vaporizarse, no fumarse.

También destaca el uso de la "Tarjeta de Cannabis Medicinal" de Releaf: el 72% de los pacientes afirman llevarla siempre consigo, y el 74% aseguran que el documento les proporciona seguridad legal cuando son interrogados por la policía.